12.2.08

Influenza


Hace poco, uno de los muchachos con los que trabajo, muy serio y que comparte conmigo la afición de leer a Poe, me dio una obra de teatro que escribió, en tres actos, bajo el género de comedia. Siendo tan serio, tenía que leer cómo este muchacho escribe comedia.

La obra hablaba de “Beto”, un revoltoso, festivo y rebelde con responsabilidades de liderazgo en cierto contexto, influencia con su comportamiento callejero a muchos, hasta el punto que todos aquellos referentes de autoridad ceden, y adoptan todo lo incorrecto que el tiene. Según el autor, este tal “Beto” resulté ser yo. Siendo comedia, quizás lo más sarcástico fuera que me pintaran como alguien fiestero, aunque siento que lo que el expone como rebeldía es símbolo del contraste que suelo marcar entre mis colegas y yo en el ámbito en el que nos conocemos. Lo que sí parece cierto, es que me pinta como alguien con poder de influencia.

Me lo propuse? No. Pero yendo a hechos, fue por mí que la tal palabra “Ñatico” se acuñó en mis lugares anteriores de trabajo en forma generalizada. De niño, por lo menos diez niños se afiliaron a mi 'pandilla' y usaban como distintivo lo que yo escogí como 'escudo': una insignia nazi (espero que sea por que tenía tendencia gráfica y no nazi). Conozco no pocas víctimas que escuchan a Fito Páez por mi. Cuando mi delirio musical eran los Jackson, no pocos fueron contagiados. Y hoy, en las aguas sociales en las que me muevo, mucho de mi trabajo es influir en forma positiva en la vida de otros.

Como imperfecto que soy y en ocasiones he sido mala influencia y he logrado que a mi alrededor gente se indisponga ante algosolamente por que yo soy el que tiene malas vibras hacia el asunto. Pero por lo general, trato de ser una buena influencia, lo cual aumenta que más gente quiera acercárse, tarea que se dificulta cuando mis ansiedades me exigen a gritos que por favor me aísle, un defecto que pocos perciben (cuando no me leen).

Entre mis buenas experiencias de influencias, quiero compartir el poder de proyectos en blog que he abierto con varios amigos. Entre ellos:“Alucinaciones Gratuitas” “Chis-Team TV”, “Las Varelas de Tin”, “Vuelo 84”, “Los Instantes”, “Veni, Vidi Vinci”, “Leiva News”, y el proyecto experimental con Marcelo de una Novela en un blog, “La Novela de Boris”. No todos han dado mantenimiento a sus blogs a la fecha, pero igual en su momento fue una faceta experimental que quisieron quemar, y gastar esos cartuchos me parece una experiencia fascinante.

Algunos al leer algunos de mis escritos han sentido el impulso de escribir un poco más, o bien compartirlo, entre ellos conmigo mismo. Estando a punto de cumplir con un tercer aniversario en la blogósfera, dedico este post a todos aquellos que de alguna forma me han permitido permearles con algo de mi influencia. Esa, mis hermanos, es en sí un gran aporte, mucho más grande que cualquiera que yo de, que me llevo de ustedes. Espero mantenerme en la línea de influencia, no ser influenza.

1 comment:

Anonymous said...

Roger se convirtió en Dictador en la comedia. Fue como un espejo, todo al revés. Lo malo por lo bueno, lo bueno por lo malo. Roger no sacó a flote su ser interior hasta que Betico se lo hizo ver e influyó en él. Todos los que conocen a Betico terminan conociéndose mejor ellos mismos, lo que los ayuda a reflejar mejor la "luz". Pero esto ya no en un espejo; esta es la vida real...

Michele.